Hoy el sol calienta, casi lo necesario, la creación brilla en descanso, para recibir esos rayos esperados. Verde,verde, alto los árboles saludando al pasar, el río sonríe al vernos conversar.
Sentados, enfrascados en decir las palabras precisas, en nuestro hablar.
Mi hijo habla, con su intenso hablar, cuestiona y se responde...y va más allá.
Hoy, si llegamos a un acuerdo: ¿que pasa con el mundo que se ha convertido en líquido? Ya nada es sólido, nada dura, todo es desechable, y la verdad se evapora en el pasar.
Matrimonios, para que hablar, ya nada perdurará. Hoy siento, mañana no...todo terminará.
Y los hijos? Entran y salen en la vida sin timón, miran y no encuentran. No les gusta. Andan, sin encontrar y se pierden en la obscuridad.
Es por eso que digo que la vida es un tejer. Parece bello por delante pero lleno de nudos y desorden por atrás. Me pregunto, ¿Vale la pena continuar? Digo que si,lo que se comienza hay que terminar, el tejido va a resultar, lo que toma tiempo, entrega, dedicación, y orden es: formar, armar y construir... y ese tejido durará.
Como la vida misma. .. las cosas que más valen la pena son aquellas en las que invertimos sudor y lagrimas y que a pesar del dolor que se viva en el intento, el resultado es enriquecedor. Bss Dña. Paulina
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